Este mes cierra Umbrales, exposición que en la Sala Cronopios del CCR rinde homenaje a Fernando Von Reichenbac, personalidad destacada del arte sonoro y pionero de la música electroacústica en Argentina.
Su recorrido busca exponer al arte sonoro como una práctica contemporánea, específica y con una historia relevante en la Argentina. Aborda la producción de arte sonoro de la última década del siglo XX y los primeros años de XXI en Argentina, en manos de artistas contemporáneos como Jorge Macchi, Nicolás Varchausky, Monica Millan, Nicolas Bacal, Buenos Aires Sonora, entre otros. Pretende ubicar a las obras en un contexto histórico y espacial, para problematizar las múltiples genealogías artísticas que, en confluencia, dan lugar al arte sonoro.
Cada una de sus piezas logra transportar al visitante a distintos momentos históricos del país -el bombardeo a la Plaza de Mayo, la guerra de Malvinas, etc.- y lugares que contrastan con la ciudad y conectan, por ejemplo, con la naturaleza. Además, las obras ofrecen la oportunidad de interactuar, jugando con cada sonido. Para no dejarlo pasar en estos días de verano. La entrada es libre y gratuita.
Sobre Fernando Von Reichenbac
Fue ingeniero, inventor, director técnico en el laboratorio de música electroacústica del Instituto Di Tella de Artes y concluyó su carrera siendo director del LIPM-Laboratorio de Investigación y Producción Musical del Centro Cultural Recoleta.
Sus invenciones eran utilizadas por artistas del Di Tella y el LIPM. Entre ellos; Jorge de la Vega, Margarita Paxsa, Eduardo Cusnir, Marta Minujin. Su máquina Catalina o convertidor gráfico analógico (1967) era capaz de sintetizar sonidos siguiendo una partitura analógica mediante una cámara de video por el cual ganó la Beca Guggenheim en 1971.